Una metida de pata de 38.2 km

Resulta que de tanto dedicarme al trabajo burócrata, en los últimos cinco años he tenido escasas posibilidades de salir y largarme con mi mochila a otro sitio como quien se pasea (siempre se me vie a la mente esa frase en el polo de una pata Agucho en Lince "... with my back and banjo I can go places").

El pasado 18 de marzo de 2011 me entró la locura de hacer un breve recorrido de Villa Rica o Oxapampa. El detalle es que un mal cálculo de tiempo me llevó a suponer que lo haría en apenas seis horas. ¿Si el auto lo hace en 1:15 porqué yo no? No leí el letrero que aparece en el gráfico. No puedo negar que fue una experiencia de las mejores que he pasado. Sin desayuno, una lluvia torrencial de cinco horas, llenándome las tabas de agua cada vez que cruzaba las ocho quebradas, hundiéndome en unos lodazales por tres veces, cuatro horas de pura subida, unas bolas de ampollas en ambas plantas del pie, robando granadilla, silencio de tránsito absoluto que hasta llegué a pensar por un momento que me había perdido, etc., etc. El resultado casi once horas de plancha.

• LO BUENO Que he batido mi propio Guiness de recorrido. El último lo había hecho en Lima allá por los ochenta buscando chamba por toda la Carretera Central.
• LO MALO Que no estimé el tiempo ni la indumentaria con la que debía andar. Ni tampoco encontrarme en el camino con excompañeros de trabajo.
• LO FEO Que hay quienes lo tomaron esto como algo negativo, por llamar la atención. Qué lástima por ellos.

No estaría mal repetir el plato una vez más. Se los recomiendo.